USHUAIA : EL FIN DEL MUNDO ; LA TIERRA DEL FUEGO

UAIA -Bahía ; USH - hacia el Oeste’, en indio Yamana ; el primer europeo que pisa esa tierra fue un religioso anglicano llamado Stirling, en 1869 y establece una Misión ; en 1884 se funda formalmente como ciudad argentina por su Armada y en 1900 se establece allí la famosa prisión –al estilo de alcatraz, imposible escapar, donde las montañas, el mar y el hielo eran los vigilantes- y que sería desmantelada en 1947 ; pero el primero que la ve fue la expedición de Magallanes, que la bautizaron Tierra del Fuego, allá por el 1 de noviembre de 1526, cuando cruzó el estrecho que lleva su nombre y descubrir por fin el paso al Pacífico que se llevaba buscando desde 1492 con Cristóbal Colón ; la expedición observó numerosos humos en tierra y de ahí el apodo ; ese mismo estrecho crucé yo en barcaza para llegar a Ushuaia, mágica y encantadora, que sabe conjuntar armoniosamente la nieve y la mar, la montaña y la estepa, el frío y el sol, lagos y bosques … todo en una ciudad ;  Ushuaia está actualmente volcada al turismo porque éste aumenta vertiginosamente ; hablando con viajeros de todo el mundo, no hay quien se precie como tal si no ha visitado 'el fin del mundo' ; he vuelto a tener mucha suerte y el sol ha salido los días que he estado en este lejano lugar, donde el tiempo cambia en cuestión de minutos ; Ushuaia tiene además del turismo, recursos en hidrocarburos y turba, que vende casi en exclusiva a Japón, además de ganadería lanar, pesca y madera preciosa como la lenga, de color rosado y muy ligera ; Ushuaia tiene un hechizo especial, una ciudad que crece mirando al mar por las faldas de las montañas andinas, a su oeste, donde se pone el sol y donde sus atardeceres son muy especiales ;  me llamó la atención que en una ciudad donde el agua es uno de sus principales recursos naturales, no tuviera una red publica de abastecimiento que ofreciera a sus habitantes agua cristalina y transparente ; el agua sale turbia ; una muestra mas de las contradicciones de Argentina, rica en recursos pero que por la mala gestión de sus gobernantes y políticos, y por la pasividad o dejadez de muchos de sus habitantes, parece que no llega a despegar definitivamente hacia el progreso y el crecimiento, siendo líder y referencia en la unidad latinoamericana junto con el otro gigante americano : Brasil.  También me llamó la atención el ‘cariño’ que le tienen a los chilenos, sus vecinos, y con los que están condenados a entenderse si ambos quieren prosperar. Lo mejor de Ushuaia, como en otras ciudades argentinas, son sus recursos humanos : la hospitalidad y generosidad de sus habitantes supera cualquier expectativa y yo he tenido la suerte de encontrarme con los Ariztegui, de ascendencia vasca, una familia extraordinaria con la que he pasado momentos inolvidables ; como inolvidables han sido los parajes, paisajes y lugares naturales de Ushuaia … he disfrutado observando lo agreste y salvaje de este ‘fin del mundo’, … todavía sigo asombrándome de lo que mis ojos captan y me quedo embelesado viendo tamaña Creación variopinta y única.  Visité la Morada del águila, Cerro castor, el Glaciar Martiel, la Reserva Natural de la Tierra del fuego con su ‘Tren del fin del mundo’, un tren que construyeron los presos argentinos en 1900 en unas condiciones penosas y lamentables ; también admiré su lago roca, su bahía Lapataia y su cementerio de árboles, testigos mudos de la destructiva mano humana en la naturaleza ; Ushuaia me ha sabido a poco, … creo que voy a tener que volver.